Cuando busques en silencio la perdida luz lejana allí posaré mis ojos hacia tu dulce mirada y, cuando escuches el silvo de una obsoleta esperanza serán tu credo mis versos cual mil besos en palabras y cuando caigas rendida tan cansada en nuestra cama yo velaré por tus sueños y aguardaré tus mañanas, yo esperaré tus sonrisas yo dibujaré tus alas y aunque aún no me lo creas yo te amaré con el alma. Cuando digas "tiempo al tiempo" yo te esperaré con ansias, y cuando estemos muy lejos acortaré las distancias, yo reiré mientras rías también secaré tus lágrimas, yo te daré mil caricias para tus manos tan blancas, te regalaré palomas te prestaré mis ventanas tú serás de mis instantes lo que para el pez es agua todo sea por amarte hasta amarte con el alma.